Hagamos una carrera hacia tu corazón


viernes, 7 de diciembre de 2012

16 años y un diario ♥ 12

Querido diario: 3|12|12

Otro gran día como siempre. Hoy hemos faltado a clase y no he vuelto a casa para comer.
Mario me llamó a las 8 de la mañana para que me llevase un bikini, que nos íbamos a ir otra vez al lago y que no íbamos a ir al instituto. Estaba muy contenta, íbamos a ir al lago otra vez y esta vez me ha avisado de que me llevase el bikini. No sabía donde estaban, en diciembre no suelo tenerlos a primera vista en el armario, así que estuve un rato buscándolos. Una vez encontrado, me preparé una mochila y me metí la toalla, la cámara, ropa... 
Nada más salir de mi casa estaban Mario, Celia y David esperándome. No me esperaba que ellos dos también se vinieran, pero no estaría nada mal.
Por el camino Celia me fue contando que el otro día David la llevó a esquiar y que se lo pasaron muy bien.
Llegamos al lago hacía mejor tiempo que el otro día.
-¡Venga vamos!- dijo David.
David y Mario se tiraron los primeros, mientras tanto Celia y yo nos estábamos quitando la ropa. Celia se había puesto su bikini rosa favorito y yo me había puesto el azul celeste. Entonces nos tiramos las dos, estaba el agua congelada esperaba no ponerme mala para las vacaciones.Entonces Mario se acercó a mí y yo me abalancé sobre él y caímos en el agua y terminamos dándonos un beso.     

Después de toda la mañana en el agua los chicos nos prepararon la comida. Nos hicieron unos bocadillos.
Más tarde David fue a acompañar a Celia a su casa y a mí me acompañó Mario. Nos despedimos con un beso. 
Ha sido una tarde muy bonita. 
Cuando llegué a mi casa me duché y me puse el pijama. Fui a abrir el armario y allí estaba la frase que me escribió Mario, empecé a sacar ropa para prepararme las maletas. Es un mes, y me tengo que llevar bastante ropa.
Bueno voy a mirar el tiempo a ver que tal, pero creo que por Canarias no nos va a llover.                                                                  

16 años y un diario ♥ 11

Querido diario: 2|12|12

Que buen día ha sido el de hoy. De camino al instituto he ido con Celia y hemos estado hablando. A la llegada nos hemos encontrado con África y nos hemos ido las tres a clase.
Estamos en el recreo Celia y yo, cuando se acercaron Mario y David.
-¡Chicas tenemos que deciros una cosa muy importante!-dijo David
-¿A sí? Pues venga decírnoslo-dijo Celia, la verdad es que ella estaba muy impaciente por saberlo.
-Pues...nosotros-Mario quería hacerse esperar, aún no quería decir nada y Celia y yo estábamos muy nerviosas por saber aquello que nos iban a decir.
-¡Venga ya, decirlo!-dije.
-Está bien, vamos a decírselo ya Mario.
-Va ¡jaja!
-Pues mirar chicas, estas Navidades no hagáis planes porque...
-¡¿Por qué?!-Celia ya no podía más.
-¡Porque nos vamos de vacaciones los 4!-Exclamó Mario.
-¿ A dónde?-dije dándole un abrazo a Mario.
-A...
-¿Dónde? ¿Dónde?-decía Celia
-¡A Caaaaaaanarias!
-¡¿A Canarias?!- Celia y yo no nos lo podías creer.
-¡Si! Nos vamos el día 5 a las 6:30 de la mañana en avión.-dijo David.
-¡Bieeeeeeeeeeeeeeeeeeeeen!-Celia no paraba de gritar de la emoción.

Le he preguntado a mi madre que si me dejaba. No le he dicho nada de que iban también David y Mario solo que íbamos Celia y yo y que África no quería venirse. Mi madre ha dudado un poco al principio, porque no me creía pero al final me ha dejado.
Qué feliz estoy y que bien me lo voy a pasar. Ahora se lo tendremos que contar a África que no le va a sentar muy bien.

martes, 4 de diciembre de 2012

16 años y un diario ♥ 10

Querido diario: 1|12|12

¡Ya estamos en diciembre! Me encanta este mes, sobre todo por la Navidad, puedo estar todo el tiempo con mis amigas y las calles, todas llenas de luces y todo tan bonito y romántico.
Nada más llegar al instituto estaba Mario esperándome en la puerta, me ha dado un beso y nos hemos ido juntos a clase.
Me hace mucha gracia que Mario me este todo el rato mirando. Ya le han llamado varias veces la atención por no prestar atención en clase. Siempre que me giro para mirarle, él ya me esta mirando y sonriendo. Está loco pero le quiero.
Esta vez en el recreo no hemos ido al lago. Me hubiese gustado mucho ir, pero hemos estado Mario y yo solos. África ya se empieza a enfadar, dice que dos gansas como nosotras (Celia y yo) con dos chicos guapísimos y ella soltera. Dice que ya la estamos dejando de hablar, pero no es así por eso le hemos prometido que esta tarde íbamos a ir al mcdonald's.
Ha sido una tarde genial, hemos estado las tres juntas todo el rato riéndonos, pero a mi me ha faltado Mario y a Celia, David. Se nos notaba en la cara. Además no he dejado de recibir whatssapps.
De todas formas ha sido una gran tarde, hace tiempo que no pasaba tan bien con ellas.
Bueno estoy hoy estoy muy cansada, me voy a dormir.

domingo, 2 de diciembre de 2012

16 años y un diario ♥ 9

Querido diario: 30|11|12

Ayer, como estuve todo la mañana en el lago me he levantado resfriada. Echaba de menos Mario, además hasta mañana no le iba a poder ver y un día sin él se me hacía eterno.
Me pasé toda la mañana durmiendo. Después vino Irene (mi hermana) y me despertó con un fuerte abrazo. Bajé a comer un poco de sopa que me había preparado mi madre. No hable nada durante la comida. Estaba con el móvil para ver si me llegaba algún whatssapp de Mario, pero no, solo tenía mensajes de Celia, África y María preguntándome porque no había ido yo a clase. ¿Tan poquito se preocupa de mi? ¿Ya me ha olvidado? Me subí a mi habitación y oí como mi madre y mi padre se iban a trabajar. Mi hermana se fue al colegio diez minutos más tarde de que ellos se fueran. Estuve hablando un rato con María en el tuenti, aunque no la hacía mucho caso. Solo miraba el chat para ver si se conectaba Mario, pero no se conectaba. 
De pronto llamaron al timbre, no tenía ganas de abrir ni de levantarme del sofá, pero no paraban de llamar al timbre y tenía miedo. Me asomé por la ventana pero no veía a nadie, pero el caso es que seguían llamando. Fue entonces cuando recibí un whatssapp de Mario, que decía:
-"¿Estas en casa? "-
Y abrí la puerta, allí estaba Mario delante de mí. No quería que me viera con el pijama.
-Estas preciosa- me dijo.
-Seguro, con estas ojeras y con pijama, no es que esté preciosa-dije.
-Tú estas preciosa siempre.
Le sonreí aunque no estaba segura de eso.
-Ven pasa, vamos a mi habitación.
Mientras el esperaba en la habitación, fui al cuarto de baño para lavarme un poco la cara y me hice una coleta. Entré a la habitación y estaba sentado en la cama.
-¿Qué tal estas?
-Bien, ahora que estás tú mejor.
Me agarró y me besó, los dos caímos encima de la cama. Nos separamos y él se levantó. 
-¿Tocas la guitarra?
-Antes, ahora ya apenas tengo tiempo, aunque de pequeña me gustaba mucho.
-Me encantaría que algún día compusieses algo para mí.
-Tengo varias canciones hechas, si quieres te dedico una.
Entonces me puse a tocar la guitarra, no tenía muchas ganas pero quería hacer un esfuerzo para que me oyera, ya que me lo había pedido. Mientras tocaba me miraba a los ojos y eso me gustaba. Al terminar me besó.
-Es preciosa la canción, pero no tanto como tú.
-Gracias, no creo que sea para tanto, pero tendré que creerte.-dije.
Entonces se abalanzó sobre mi y me empezó a dar besos. Estuvimos así toda la tarde hasta que se abrió la puerta. Era mi padre que había llegado de trabajar. Hoy a llegado más pronto de lo habitual. No sabía que hacer. Oía como subía las escaleras y le dije a Mario que se escondiera en algún lado.
-No pasa nada, le decimos que he venido a traerte algo.
-No se lo creerá. Ahora a ver que hacemos. Escóndete debajo de la cama.
-Venga Carla debajo de la cama no ¡jaja!
-Bueno pues en el armario ¡corre que viene!
-Está bien pero que sea la última vez que me escondo.
Llega mi padre y me dice que que tal he pasado la tarde. Hemos hablado durante un rato pero no mucho. Una vez que se fue mi padre, Mario salió del armario y me dio un beso. No tenía ganas de que se fuera, pero se tenía que ir y además era ya muy tarde. Tuve que despistar a mi padre para que él se fuera sin que se diera cuenta mi padre. Volví a la habitación y cogí el móvil y estuve hablando con él, me dijo que mirase en el armario. He ido a mirar y me encuentro en el fondo del armario una frase escrita:
-"Es de valientes enamorarse, te quiero"- 
Ahora me voy a dormir con esta frase en la cabeza. 

sábado, 1 de diciembre de 2012

16 años y un diario ♥ 8

Querido diario: 29|11|12

Cada vez me pasan cosas más bonitas. Hoy al llegar a clase no he visto a Mario, estaba un poco triste porque echaba de menos sus besos. Al sentarme en la mesa me he encontrado una carta que ponía lo siguiente:
-" Ven, empecemos a escribir nuestra historia de amor " -
En ese momento me hubiera gustado que estuviera conmigo. 
Llegó el profesor y todavía no había llegado Mario. Diez minutos más tarde, llamaron a la puerta, era David. El profesor le regañó y le puso un retraso, antes de sentarse David me dio una nota y me guiñó el ojo. Ponía lo siguiente:
-"Quiero perderme en tu mirada y encontrarme con tus besos "-
Otra nota y era igual de bonita que la anterior, no sabía que estaba ocurriendo y tenía muchas ganas de verle.
En los tres minutos David se volvió a ir de la clase y regresó con otra nota. 
-"Te espero en la puerta trasera del instituto ¡TE QUIERO! "-
Yo no podía esperar más, la clase no terminaba nunca y no veía la hora de salir hacía la puerta de atrás para encontrarme con él. Al fin suena la sirena, salí corriendo y no esperé a ninguna de mis amigas. 
Una vez allí veo a Mario:

-Llegó la hora -dije.
-¿De qué?
-De estar juntos para siempre.
-Te quiero.
Entonces nos besamos. Me cogió de la mano y nos fuimos del instituto. No sabía donde me llevaba pero confiaba en él.
Me tapó los ojos y llegamos a un lago. Era todo precioso, estaba alejado de la ciudad, solo se veía el color el verde de los árboles, y antes de que me diera cuenta Mario se tiró al agua. Antes de que yo me metiera me dijo que este lugar solo lo conocía él. Me animo a meterme al agua, yo no quería porque a finales de noviembre el agua estaría congelada.
-¡Venga tírate!
-No tengo biquini.
-¿Qué pasa? Te da vergüenza estar en ropa interior delante de mi.

Entonces me empecé a quitar la ropa, Mario me estaba mirando y me daba vergüenza. Mario empezó a reírse al ver que estaba toda roja, no sé si del frío o por la vergüenza. Al fin me tiré. Mario me agarró y nos hundimos dándonos un beso. Estuvimos así toda la mañana. Ha sido el mejor momento que he pasado en mi vida. Espero que se vuelva a repetir.

LE QUIERO

16 años y un diario ♥ 7

Querido diario: 28|11|12

Hoy me he levantado feliz y ha salido todo perfecto. De camino al instituto he estado hablando con Celia y le he contado todo y ella me ha contado su parte. Celia ha dicho que sería muy bonito que las dos parejas saliéramos; a mi me encantaría ser la novia de Mario lo que pasa es que hasta ese momento no sabía que me quería. Antes de llegar a clase me he encontrado con Marta y me ha dicho que estaba arta de mi. Que me vio besándome con Mario y que por mi culpa no se lo pudo ligar (aunque no la hubiera dejado ¡jaja!). Entró Mario a la clase y me miró, le sonreí y el me contestó con su sonrisa. No pudimos hablar porque llegó el profesor. En los tres minutos de clase tampoco pudimos hablar porque Celia me pidió que la acompañase a la parte trasera del instituto para encontrarse con David, fue muy bonito porque David le dijo lo que sentía por Celia; a mi me gustaría que Mario me lo dijera pero seguro que eso es imposible.
Al regresar a clase me senté con Celia y no me hacía caso porque estaba embobada mirando a David y él a ella. Me giré para mirar a Mario y me encontré con su sonrisa.
En el recreo nos fuimos detrás de el patio donde solemos estar siempre, cuando Celia y África las vi que se iban, de repente alguien me tapó los ojos y mi susurro al oído " Estas tan guapa como siempre" me giré y ahí estaba él. Y me empezó a hablar:
- Tenemos que hablar de lo que pasó ayer. Perdona por lo del beso, pero es que estaba deseando que llegase este momento. Te quiero Carla.
Yo no sabía que responder y al final le bese. Él se quedó impresionado. Nos fuimos de la mano a la clase aunque entramos separados. Me fui con África al baño y se lo conté todo,  me dijo que estaba loca pero que lo que dije era la realidad. De camino a clase también se lo conté a  Celia y se emocionó. Cuando entré a clase me encontré con un gran te quiero en la pizarra. No me lo podía creer, era para mi, lo había puesto Mario estaba tan impresionada que no me di cuenta de que el profesor ya había llegado.
Bueno me ha llegado un whatsapp. Adiós.